Conocida es la locura, futbolisticamente hablando, de Sebastián Abreu. Y uno de los mejores momentos en que se puede ver al Loco en acción, es cuando se encuentra a once metros del gol, en un duelo entre él y el arquero rival.
En esta ocasión, Abreu volvió a utilizar su mente fría, aquella que también tuvo en Sudáfrica para picar el penal ante Ghana, que le permitió la clasificación a semifinales a Uruguay. Y quien lo sufrió esta vez fue el Fluminense.
El Loco se encargó de patear un penal, en el minuto 51 de partido, con el resultado 1-2. Abreu no dudó en picar la pelota, lo cual es habitual en el uruguayo, pero eligió hacerlo hacia el medio del arco, lo que permitió que Diego Cavalieri, arquero del Flu, se quedara parado y atajara, con total displiscencia, el tiro de Sebastian Washintong.
Pero sólo cuatro minutos después, el uruguayo tendría su revancha. Y no dudó en volver a picarla, esta vez, hacia la izquierda de Cavalieri, quien se arrojó hacia el otro lado. De esta manera, Botafogo empató el partido y luego lo daría vuelta. Una locura más de Abreu y van...
LOS PENALES DEL LOCO:
El primero, al medio. Cavalieri se adueña de la pelota
La revancha. Abreu la tira hacia la izquierda. Cavalieri no aparece en la foto.
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